Sólo ha sido necesario que transcurra una semana para REconocer (porque ya lo conocíamos) lo complicado que resulta comunicarse. Supongo que es porque es algo que vivimos diariamente y las consecuencias de los éxitos y fracasos en el proceso nos afectan de manera directa y (muchas veces) inmediata. Además, qué haríamos sin la comunicación. Este módulo me ha hecho reflexionar sobre ese punto en específico, concluyendo que los seres humanos siempre tenemos una manera de comunicarnos y, si no la tenemos, la buscamos, creamos, mejoramos y encontramos. Entonces fui al segundo punto que se me ocurrió, ¿qué hacemos sin un medio a través del cual comunicarnos (canal)?, ¿qué tal sin el celular o, mejor aún, sin el Blackberry? Personalmente, me cuesta mucho imaginar este escenario. Parece que hemos naturalizado mucho la inmediatez de la información y la posibilidad de compartirla con otros. Creo que esto es un aspecto positivo de la comunicación actual, tal como yo la percibo. Explico: estamos pendientes de los mensajes que nos llegan al teléfono, de los correos electrónico que recibimos, de los replies de Twitter y de las notificaciones de Facebook. Todo es interacción. Es verdad que las redes sociales han sido criticadas porque nos acostumbran a comunicarnos de modo virtual más que face to face (como dicen por ahí), pero también es cierto que nos han enseñado a comunicarnos de maneras diversas y cualitativamente diferentes. Todo el tiempo estamos expuestos a nuevos modos de comunicarnos y eso es enriquecedor. 
Lo más interesante (hasta ahora, por supuesto) es que a través de la red estamos aprendiendo sobre la comunicación que se da en todos los contextos. Muchas personas se basan en el argumento de que internet nos está quitando la vida, que pasamos más tiempo frente a la computadora que con la gente, pero esto sólo es así si nosotros lo permitimos. El mundo virtual tiene una oferta interesante, pero no es excluyente a lo que encontramos en el contexto 1.0. Por eso el ejemplo de esta semana de aprendizaje me parece interesante: patrones de respuesta (disfuncionales) que llevamos a cabo y observamos día a día en gente de verdad, no sólo en el foro en el que comentamos, o en las redes sociales que frecuentamos. Afortunadamente, la comunicación se ha ampliado y podemos sumergirnos en cualquiera de sus múltiples modalidades. Ojalá los seres humanos avanzáramos (se entiende que para mejor) a la par de la comunicación y la tecnología.
No hay comentarios:
Publicar un comentario